SE DIJO
(probablemente por un periodista sensacionalista que quería vender más):
que el padre VIOLÓ y asesino a su hija de 2 años.
SE PROBÓ, que
hasta el momento, la Fiscalía solo formalizó por un maltrato de la
menor (fue sacudida violentamente, lo que le causó lesiones internas),
derivando en su muerte.
LEGALMENTE
la Fiscalía postulará que aunque el ánimo del hechor fuese solo de
maltratar y no matar, igual la conducta sería calificada de homicidio o
parricidio, porque se puede presumir que el supuesto padre actuó con
dolo eventual, ya que no podía menos que representarse que ese maltrato
podía producir la muerte.
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EN SINTESIS, lo que obviamente
más indignó a la gente es la versión de que el supuesto padre VIOLÓ a su
hija de dos años y luego la asesinó; la sola representación mental del
acto causaba la suficiente repugnancia para alterar los ánimos de la
sociedad. Sin embargo, no hay evidencia de violación o abuso sexual,
hecho éste que se prueba porque la Fiscalía no lo menciona en su
formalización.
El homicidio o parricidio (si es que se prueba es su
padre biológico) podría estar bien encaminado, si es que las
afirmaciones de la Fiscalía luego se refrendan con la prueba
pertinente.
Ahora, como la Fiscalía es un actor relevante en nuestro
Sistema de Justicia, una de cuyas funciones es la paz social, debiera
actuar de manera de ilustrar a la población, particularmente cuando
parte de ella se ha visto azuzada en sus pasiones por teorías sin
sustento (violación), y ser bastante clara respecto del tipo de delito
que se investiga.
