Con la intervención de Piñera, nos estamos pareciendo a Argentina y Venezuela, donde no se respeta la institucionalidad y donde no hay certeza jurídica. Así cualquiera va a invertir con mucho gusto...en otra parte.
Si la normativa fuese mala, cambiarla pues, pero en ningún caso a punta de telefonazos.
Curioso que en un gobierno de derecha se viole tan flagrantemente los derechos de los emprendedores y se apuntale al lado del populismo. Recuerdo que Bachelet, en cambio, ante una medida impopular como la suspensión en la construcción del puente sobre el Canal de Chacao, optó por una respuesta racional y técnica.
No es presentable que el Presidente Piñera, ante su primera prueba de fuego, que ni siquiera la tomaba él sino que un organismo técnico, opte por congraciarse con quienes opinan desde el lado de la emotividad.
Lamentablemente así es como, plagado de buenas intenciones para con el pueblo y con el ánimo de complacerlo a corto plazo, Chávez y Kirschner se vuelven populistas, a costa del Estado de Derecho. Y si se deja que esto se haga una forma común de gobernar en Chile, perderemos todo el prestigio de país serio, que habíamos ganado con tanto esfuerzo.
Si la normativa fuese mala, cambiarla pues, pero en ningún caso a punta de telefonazos.
Curioso que en un gobierno de derecha se viole tan flagrantemente los derechos de los emprendedores y se apuntale al lado del populismo. Recuerdo que Bachelet, en cambio, ante una medida impopular como la suspensión en la construcción del puente sobre el Canal de Chacao, optó por una respuesta racional y técnica.
No es presentable que el Presidente Piñera, ante su primera prueba de fuego, que ni siquiera la tomaba él sino que un organismo técnico, opte por congraciarse con quienes opinan desde el lado de la emotividad.
Lamentablemente así es como, plagado de buenas intenciones para con el pueblo y con el ánimo de complacerlo a corto plazo, Chávez y Kirschner se vuelven populistas, a costa del Estado de Derecho. Y si se deja que esto se haga una forma común de gobernar en Chile, perderemos todo el prestigio de país serio, que habíamos ganado con tanto esfuerzo.